Tú puedes ser comediante

La comedia como todo en la vida se puede aprender, ser comediante requiere de mucha confianza, práctica, y disciplina, es como tocar la guitarra o aprender un idioma, lo bueno es que en este caso el camino es divertido.

Si te esmeras y te comprometes, en un futuro no muy lejano serás un gran comediante, pero seamos honestos, el camino es largo y apenas estás comenzando, lo que si te garantizo es que al terminar de leer el libro tendrás una rutina de por lo menos diez minutos, pero lo más importante y la razón de este texto es que al culminar su lectura tendrás en tus manos los mecanismos para hacer humor.

Como una recomendación, haz pausas y no leas todo el libro en una sola sentada, toma tiempo para ver los comediantes que referimos, analiza su forma de entregar el material, como construyen sus rutinas, porque aunque es un pecado capital copiar el material de otros, al principio es fundamental comprender como se hace comedia y esto lo puedes lograr mientras te ríes; te aseguro que después de entender cómo se crean las premisas y como se escriben los remates, verás a los comediantes con una perspectiva completamente diferente.

Puedes enfocarte en este proyecto desde tu ermitaña soledad o puedes trabajar con otra persona que también quiera ser comediante, en inglés se le conoce como el Comedy Buddy y no es más que un amigo con quien puedes probar tu material y debatir ideas, ten presente que lo que para ti sea el chiste de oro para el público puede ser difícil de entender. Un amigo de la comedia es un compañero de ruta con los mismos objetivos, tendrá la figura de juez amable como también necesitará tu incondicional opinión. En la elección de esta persona considera que no debe ser tu pareja ni tu madre, porque el cariño hacia ti puede nublar su criterio y te dirán que eres el mejor, pero el público puede ser implacable y al momento de enfrentarlo sentirás una decepción del tamaño de una casa con piscina. Si trabajas con una persona que esté enfocada en el mismo objetivo será un beneficio mutuo, al momento de tallerear (revisión de material) se pueden corregir remates o conseguir otro chiste con más acierto. Si te preguntas cuántos amigos de la comedia puedes tener, la respuesta es simple, con la cantidad que te sientas a gusto